El blanco y el negro enemigos en cuanto a su simbología se refiere, pueden ser perfectos aliados para pintar o decorar un dormitorio. Pero hay que tener mucho cuidado, sobre todo con el color negro. Pero bien combinados podemos crear multitud de ambientes diferentes.
Con estos dos colores, sobre todo lo que vamos a conseguir son dormitorios modernos, no van a ser cálidos, ni muy adecuados para niños pero si sofisticados y actuales.
Prevaleciendo siempre el blanco por encima del negro, crearemos un ambiente sereno, puro, tranquilizador, y con algunos toques de negro, le añadiremos contraste para crear un dormitorio moderno como esta habitación, como veis está toda pintada de blanco, pero gracias al vinilo de letras negras le da ese toque moderno y actual sin sobre cargar la habitación.
En esta otra habitación pasa lo mismo, toda la estancia está pintada de blanco y al ser de madera, le da ese toque cálido y acogedor pero gracias al simple vinilo de la pared en negro y algunos complementos textiles del mismo color, se consigue apagar el toque acogedor para evocar un ambiente más moderno y actual.
Como veis, si hacemos que el blanco prevalezca sobre el negro siempre conseguiremos ambientes luminosos, serenos y tranquilizadores.
Pero qué pasa si prevalece el negro sobre el blanco. Pues el cambio es radical, en lugar de conseguir un ambiente luminoso y sereno, conseguimos que la estancia sea más fría, más distante pero no por eso peor decorada. Fijaros en este dormitorio.
Toda la habitación está pintada de negro, incluso los textiles del suelo también son negros, gracias a la estructura de la cama blanca y a la gran cantidad de luz natural que entra en la habitación, hacen soportable tanto color negro, creando un ambiente contemporáneo.
Como veis, si tenemos cuidado y elegimos bien la combinación se pueden crear auténticas obras maestras de la decoración utilizando el blanco y el negro.
Si quieres añadir un toque metálico y futurista a la habitación puedes utilizar el gris como intermediario entre el blanco y el negro, como este dormitorio.
Gracias a la perfecta combinación de los tres colores (blanco, gris y negro) se consigue una habitación contemporánea con un toque metálico.
(Y)